Monthly Archives: noviembre 2015

RESIDENTE NECESITA HACER ALGO EMOCIONANTE EN SUS VACACIONES

Una preocupación en la vida del residente es que hacer con sus vacaciones. Veintiséis días de libre albedrío por año trabajado, algo más de un mes gregoriano si te lo organizas con habilidad.

Una asociación de estudiantes de la Universidad de Medicina de Valencia estaban organizado un proyecto de atención sanitaria en Senegal. (1) Era el tercer año que trabajaban en la misma zona y en esta ocasión habían dejado un mensaje en el facebook preguntando por personal sanitario, dejando la puerta abierta a los motivados pero imberbes residentes..

Siguiendo las leyes de la asociación de ideas (o como decía Hume, por el simple hecho de que unas ideas atraen a otras, del mismo modo que en el mundo físico un cuerpo atrae a otro merced a la gravedad), ya tenía destino para las vacaciones.

Pero la febril pulsión del primer momento se difumina cuando una voz te sugiere… qué va a pintar allí un residente de segundo año?…si para experimentos en África ya se las vale la Industria… Como suele pasar, en el primer momento de subidón ya les has escrito, les has dicho que estás interesada y confirmado que te apuntas.

Afortunadamente, o como premisa de la decisión, era una pequeña asociación, con sus logros y desventuras, pero lo más importante, una asociación que ya conocía. Pues en el amplio espectro de apariencias de la cooperación y sus agentes, más vale la pena contar con una visión lo más próxima a su versión original. Nos sentamos, pusimos sobre la mesa alguna cerveza, nuestros miedos y limitaciones y compramos los billetes.

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Episodio crítico I: los dos primeros no puedo

Ésta ha sido mi tercera guardia. Aunque seguimos siendo residentes mochila y todas las pruebas y tratamientos han de pasar supervisión del adjunto de turno, los pacientes los vemos nosotros de principio a fin y si está bien historiado el médico adjunto ni se pasa a verlo.

La última de mis pacientes antes de irme a cenar era mujer rumana, que venía son su marido por el mismo problema que ella, un dolor de muelas insoportable y claros signos de inflamación de encías. Su boca era un desastre, entre ella y él no juntaban ni la mitad del número total normal de muelas, y las que tenían todas  en un estado deplorable, esas bocas no habían conocido un cepillo de dientes. Claro está que tampoco habían conocido algo más que costara 3 euros ni estaban acostumbrados a masticar todos los días.

La mujer venía con gran dolor, de irradiación típica hacia zona temporal que no le dejaba dormir. No tenía signos claros de absceso pero sí era evidente una infección. Enantyum IM para el dolor y prescripción de antibiótico durante una semana (que mejorarse el nivel educativo, cultural y económico para una mejor higiene bucal es algo que se escapa de la consulta de urgencias)

Firmo yo, firma mi adjunto y les despido con el informe de alta. Mientras hace como que sale del box el hombre me para y me dice que ella no tiene papeles y que por lo tanto no puede sacar de la farmacia lo que yo le recomiendo y su médico de Atención primaria tendría que prescribir.

Sabía lo que me estaba diciendo pero tardé unos segundos en reaccionar. En este momento en España a todo inmigrante que no tenga papeles y que no sea menor de edad o esté embarazada sólo se le atenderá, acorde a la ley, en urgencias e, incluso, en varias comunidades pero no en ésta (Murcia), se le pasará una factura por el cobro de su episodio urgente. De tal modo que no tiene derecho visitar a su médico de atención primaria, que es quien se encargará de tratar los episodios crónicos (diabetes, problemas cardiacos, hipertiroidismo…) y el 90% de los episodios agudos. Es quien regularía que el uso de la atención especializada hospitalaria y de urgencias se haga de manera correcta y cuando se necesaria.

Yo en urgencias podía ponerle la primera dosis de antibiótico, pero no las restantes cada 8 horas durante 7 días.

Le pregunté a mi adjunto que qué podíamos hacer. Él me respondió que eso no era problema de urgencias así que volví frente a los dos pacientes sin todavía saber qué decir. Fueron mis primeros “Lo siento, no puedo”.

Volví a casa y me repasé los datos.

Lo lamento... pero aquí no podemos atenderle

En este contexto, unas semanas después recibí el curso de Atención a grupos poblacionales de riesgo.

Asunto peliagudo es evaluar por quien has de ser evaluado, sobre todo cuando la capacidad punitiva se encuentra en el otro lado, y sé que de momento este portafolios me está quedando muy crítico en el comienzo (prometo cambiar al avanzar estas páginas) pero, y supongo que condicionado por el episodio que he comentado anteriormente, no puedo expresar sino mi descontento con dicha ponencia.

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